La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) abrió un nuevo caso con el que pretende esclarecer los delitos que se cometieron durante el conflicto armado en el país.
Se trata del Caso Conjunto 04-09, que articulará las investigaciones relacionadas con el departamento de Chocó en el marco del Caso 04, que priorizó la situación territorial de Urabá, y del Subcaso Chocó del Caso 09, enfocado en los crímenes no amnistiables cometidos contra pueblos y territorios étnicos.
La investigación busca, según explicó la JEP, esclarecer los crímenes más graves y representativos ocurridos en los municipios ubicados a lo largo de la cuenca del río Atrato, una de las regiones más golpeadas por el conflicto armado.
Es decir, en los municipios de Acandí, Unguía, Carmen del Darién, Belén de Bajirá, Riosucio, Belén de Bajirá, Bojayá, Medio Atrato, Quibdó y Vigía del Fuerte, entre otros.
La decisión de unir dos casos se basa en que ambas investigaciones abordan hechos ocurridos en el mismo territorio. Además, comparten la presencia de actores armados, patrones criminales, periodos históricos del conflicto, así como comunidades y territorios afectados.
«Estas condiciones permiten a la JEP abordar de manera articulada la situación de las comunidades étnicas en esta zona, avanzar con mayor celeridad en el esclarecimiento de la verdad y brindar una respuesta más integral y restaurativa a las víctimas», explicó esa jurisdicción.
La JEP investiga crímenes cometidos entre 2002 y 2016 por estructuras del Bloque Noroccidental de las extintas Farc-EP, así como por integrantes de la fuerza pública y terceros civiles.
Foto y noticia: Colprensa