La Asociación Nacional de Alumbrado Público y Ciudades Inteligentes (ANAP) reconoció el proceso de modernización del alumbrado público que se adelanta en Pereira, destacándolo como un referente nacional en eficiencia energética, sostenibilidad y seguridad ciudadana.
Durante décadas, la capital risaraldense no contaba con un proyecto integral en esta materia. El uso de luminarias de sodio a alta presión, común en gran parte del país, implicaba altos consumos de energía, mayores emisiones contaminantes y deficiencias en la calidad lumínica, con efectos negativos en la seguridad y la percepción de los espacios urbanos.
Hoy, Pereira avanza en la sustitución de estas luminarias tradicionales por tecnología LED, en línea con los principios de la Ley 1715 de 2014, que promueve el uso de fuentes no convencionales de energía, y con los compromisos nacionales en reducción de emisiones.
En tan solo mes y medio, se han instalado más de 20.000 luminarias LED, alcanzando un 70% de modernización del sistema de alumbrado público. Este avance, logrado en tiempo récord con mano de obra y talento técnico colombiano, constituye un hito pocas veces visto a nivel mundial.
El proyecto cuenta con la participación de más de 300 trabajadores, quienes trabajan en dobles turnos para garantizar celeridad y calidad en la ejecución.
Beneficios de la modernización
Según estudios internacionales, la iluminación LED permite reducir el consumo energético en más del 50% y mejorar la visibilidad en el espacio público. Estos cambios impactan directamente en la seguridad ciudadana, la reducción de delitos y la dinamización del comercio nocturno.
“Una ciudad iluminada es una ciudad segura”, señaló la ANAP, al subrayar que la transformación en Pereira tendrá efectos positivos en la percepción de seguridad y en la competitividad urbana.
Retos y llamado a la ciudadanía
La Asociación precisó que algunas fallas o interrupciones que puedan presentarse durante la transición obedecen a la obsolescencia de las redes eléctricas y no a las nuevas luminarias LED. En ese sentido, hizo un llamado pedagógico a la ciudadanía para comprender que la adecuación de infraestructura es un proceso gradual.
Asimismo, exhortó a los sectores políticos de la región a no politizar un proyecto de carácter técnico y de interés general, que responde tanto al marco legal colombiano como a los compromisos internacionales en sostenibilidad y ciudades inteligentes.
Un ejemplo para el país
La ANAP concluyó que lo que sucede en Pereira debe ser motivo de orgullo nacional:
“Este proyecto demuestra que Colombia tiene el talento humano y la capacidad técnica para avanzar hacia ciudades inteligentes”.
Finalmente, el gremio invitó a las demás ciudades del país a replicar este modelo, convencidos de que la modernización del alumbrado público es una inversión en seguridad, sostenibilidad, competitividad y calidad de vida para la ciudadanía.