Antioquia. La propuesta de crear el Área Metropolitana del Valle de San Nicolás continúa avanzando bajo la promoción del Departamento Administrativo de Planeación (DAP), que busca integrar a ocho municipios del Oriente antioqueño mediante esta figura asociativa. No obstante, voces expertas han expresado reservas sobre su viabilidad.
Uno de los principales críticos es el profesor Eber Elí Gutiérrez, de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Medellín, quien considera innecesaria la creación de una nueva estructura territorial. A su juicio, Antioquia ya cuenta con mecanismos existentes como las provincias y subregiones, capaces de abordar procesos de planificación y articulación regional sin crear nuevas instancias burocráticas.
“Nos estamos llenando de un montón de organizaciones territoriales que pueden hacer lo mismo, sin esa visión integral del territorio. Lo que necesitamos son acciones reales y concretas para que los territorios se desarrollen mejor”, señaló Gutiérrez.
El académico también expresó preocupación por el financiamiento de esta figura administrativa, al advertir que los recursos municipales ya son limitados y su redistribución podría fragmentar aún más los presupuestos, afectando la eficiencia en la gestión pública.
Durante una reciente visita a Rionegro y Guarne, el director del DAP, Eugenio Prieto Soto, explicó que el objetivo del área metropolitana es fortalecer la planificación conjunta, la articulación institucional y la gestión administrativa del territorio.
A pesar de las buenas intenciones, Gutiérrez considera que esta función podría haberse desarrollado directamente desde la Gobernación de Antioquia, sin recurrir a la creación de nuevas entidades.
“Pensando en una organización de ese tipo en el Oriente antioqueño, digamos que es importante en la medida en que pueda servir para organizar la planificación regional, pero esa labor se pudo haber enfocado desde la Gobernación a través de las subregiones”, reiteró el docente.
El debate continúa abierto, especialmente ante el acelerado crecimiento urbano del Oriente antioqueño, que demanda soluciones urgentes en términos de planificación sostenible y un sistema de transporte intermunicipal eficiente.
“Si entra un área metropolitana tendría dos retos fundamentales: planificar el territorio de manera conjunta y estructurar una buena red de transporte. Pero hay que tener claro que en Colombia los planes de ordenamiento son locales, no metropolitanos”, concluyó Gutiérrez.