Un operativo de la Policía en el municipio de La Ceja, Oriente antioqueño, permitió el desmantelamiento de una polvorera artesanal que operaba de manera ilegal en plena zona urbana, dedicada a la fabricación y comercialización de material pirotécnico durante la temporada decembrina.
La acción se adelantó tras información suministrada por una fuente humana, lo que condujo a investigadores de la Sijín hasta el inmueble donde se elaboraban y almacenaban explosivos sin ningún tipo de control técnico ni medidas de seguridad, representando un riesgo latente para los residentes del sector.
Durante el procedimiento, las autoridades incautaron una alta cantidad de elementos pirotécnicos y materias primas, entre ellos 200 voladores, 1.500 churrillos, 500 tacos, 1.000 papeletas para voladores, 400 metros de mecha lenta, 200 metros de recámara y cerca de 240 kilogramos de pólvora negra, material considerado de alto poder explosivo.
Según las autoridades, la polvorera funcionaba en un entorno residencial, lo que incrementaba el riesgo de emergencias por detonaciones accidentales, incendios o lesiones, especialmente en una época en la que aumenta la manipulación de pólvora por parte de particulares.
El hallazgo se produce en medio de los reportes crecientes de personas lesionadas por pólvora en Antioquia durante las celebraciones de fin de año, una problemática que ha afectado principalmente a menores de edad y que mantiene bajo presión la red hospitalaria del departamento.
El material incautado fue puesto a disposición de las autoridades competentes, mientras avanzan las investigaciones para establecer responsabilidades penales relacionadas con la fabricación y comercialización ilegal de explosivos.
