Con una discusión sobre las intenciones de algunos partidos de violar los fallos del Consejo de Estado sobre las minorías políticas y la oposición que deben estar en las mesas directivas, se cumplió en la noche de este domingo la elección de las mesas directivas del Senado y la Cámara.

En particular se reclamó en el Senado que la primera vicepresidencia quedara en manos de un senador de las minorías, mientras que en la Cámara el debate fue porque se pretendía que en la segunda vicepresidencia que por ley le corresponde a la oposición asumiera un representante independiente cercano al gobierno.

En el Senado en donde no hubo mayores diferencias en la elección, Lidio García es el reemplazo de Efraín Cepeda. El liberal García, quien aseguró que su presidencia será en un tono más calmado y lejano a la controversia, tuvo el apoyo entre otros de los partidos Conservador, La U, Verde e incluso el Pacto Histórico. Lidio García finalmente fue escogido con 97 votos.

En la primera vicepresidencia se impuso la senadora Ana Paola Agudelo, del Partido Mira, que además de ser independiente, es minoría. Agudelo se impuso al senador Antonio José Correa, del Partido de La U, colectividad a pesar de no ser minoría postuló a un candidato para ese cargo que según el fallo del Consejo de Estado debe ser para una minoría. Agudelo ganó con 50 votos contra 48 de Correa. También se intentó postular al senador de Comunes (ex Farc), Julián Gallo, pero no prosperó.

Para la segunda vicepresidencia la plenaria escogió a la senadora de Cambio Radical, Ana María Castañeda, por le corresponde esa dignidad a la oposición. Lo particular de Castañeda es que es una de las senadoras que más apoyan al gobierno nacional. En total tuvo 92 votos.

Al tomar posesión, García indicó que “asumo la presidencia en medio de la polarización profunda y grave que tiene amenazada la institucionalidad”. De la misma forma pidió un largo aplauso para el senador del Centro Democrático, Miguel Uribe.

Habló del tema del acceso a la educación superior, del crecimiento de la economía, pero también de la preocupación por el deterioro de la seguridad en todo el país, en especial en más de 200 municipios.

“Soy amigo del diálogo y la paz negociada pero la paz no puede ser un discurso, debe ser una acción sistemática del estado. Nos ha ganado los sesgos personales”, dijo el nuevo presidente del Senado. Señaló que el Ejecutivo no puede negar los actos formales del Legislativo y que es sólo la justicia la que deberá definir.

Hizo un llamado a las fuerzas vivas del país, al presidente Petro y su gobierno, las altas cortes, entre otros funcionarios a que se unan por el desarrollo de Colombia. Sobre la reforma a la salud dijo que se dará “un amplio debate” con la participación de todos los sectores.

En la Cámara de Representantes se eligió al valluno del Partido de la U, Julián López, quien se impuso al representante de Cambio Radical, Leonardo Rico, quien se mantuvo hasta el final n reclamo a los acuerdos políticos que indicaban que le correspondía a ese partido que es hoy de la oposición. López saco 104 votos contra 76 de Leonardo Rico.

La primera vicepresidencia que le corresponde a las minorías, quedó para Juan Sebastián Gómez, del Nuevo Liberalismo con 108 voto, contra 72 votos Normal Mañol. La segunda vicepresidencia quedó para Daniel Carvalo, del Partido Verde Oxígeno, quien venció a Juan Manuel Cortes.

Foto y noticia: Colprensa