El frente Domingo Laín Sáenz del ELN y los frentes 10º, 28 y 45 del Comando Conjunto de Oriente del Nuevo Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc están en guerra en el departamento de Arauca. Los combates tienen en riesgo a la población que está atemorizada y pide ayuda del Gobierno.
Así lo reveló la Alerta Temprana 014 de 2025 de la Defensoría del Pueblo que explica que esos enfrentamientos hacen que estén en peligro los derechos a la vida, integridad, libertad y seguridad de las comunidades de los siete municipios del departamento. Es decir, Arauca, Arauquita, Saravena, Fortul, Tame, Puerto Rondón y Cravo Norte, así como Cubará, en Boyacá.
Otros grupos que representan una amenaza para las comunidades son, de manera intermitente, el Frente Acacio Medina desde el Vichada, facción disidente de la Segunda Marquetalia y la subestructura Gonzalo Oquendo Urrego desde Casanare.
«Los grupos poblacionales que necesitan la atención inmediata de las autoridades son niñas, niños y adolescentes; mujeres y hombres en procesos de reincorporación; mujeres jóvenes de cabeceras municipales y zonas rurales, acusadas de ser informantes de la fuerza pública o de otro actor armado; lideresas y líderes de estructuras organizativas, sociales y comunales; comunidades
campesinas, indígenas y afrodescendientes en situación de desplazamiento, confinamiento o vulnerabilidad; personas venezolanas en condición de migrantes; población víctima y sobreviviente del conflicto armado», dice la Alerta Temprana publicada por la entidad.
Lo anterior porque el reclutamiento y utilización de niñas, niños y adolescentes se presenta en la zona rural y suburbana de los municipios, particularmente en la ciudad de Arauca, pues el relacionamiento y acercamiento con los grupos armados ilegales es mayor. No obstante, hay casos de menores de edad reclutados en el Cauca y trasladados a Arauca.
Los municipios afectados forman parte de las subregiones El Sarare y La Sabana, claves para las estructuras armadas al margen de la ley, donde movilizan sus economías ilícitas: narcotráfico, tráfico de armas y mercancías, trata de personas y contrabando de combustibles. Por eso los enfrentamientos.
La situación de violencia da cuenta de que, en Arauca, durante el 2024, fueron asesinadas 178 personas en hechos asociados al conflicto armado interno, 19 de ellas eran lideresas y líderes sociales y una era un firmante de paz. La tasa de homicidios fue de 57,2 por cada 100.000 habitantes para ese año, ocupando el primer lugar en el país, por encima del Cauca, Valle del Cauca, Putumayo y Chocó.
Además entre enero y el 20 de septiembre del 2025, 84 personas fueron asesinadas en el departamento y en Cubará, 4 de ellas eran lideresas y líderes sociales y 2 eran firmantes del Acuerdo Final de Paz.
Ante la situación la entidad formuló 28 recomendaciones a los ministerios del Interior y de Defensa, a la Policía Nacional, al Ejército, a la Fiscalía, a las alcaldías de los siete municipios araucanos y a la de Cubará, entre otros entes, una efectiva coordinación y articulación interinstitucional, a fin de que haya una respuesta rápida, la disuasión del contexto de amenaza, investigación y acceso a la justicia, medidas de prevención y protección, la puesta en marcha de acciones y asistencia humanitarias integrales, así como emprender medidas de política pública que permitan mitigar y superar vulnerabilidades sociales.
(Colprensa)