El fenómeno migratorio de personas venezolanas hacia Colombia ha planteado desafíos significativos para el país en términos de integración y respuesta humanitaria. De igual manera, es importante destacar que este fenómeno también ha generado oportunidades en diversos sectores y ámbitos, incluyendo el sector financiero. Por lo tanto, resulta crucial comprender mejor su situación socioeconómica e identificar las necesidades financieras específicas, así como las oportunidades de inclusión.

Según los datos de Migración Colombia, hasta el 31 de marzo de 2023, se habían pre-registrado 2.448.908 personas en el Registro Único de Migrantes Venezolanos (RUMV). Del total de personas, al menos el 66% se encontraba en edad de trabajar, de las cuales el 53% eran mujeres y el 47% hombres.

En este contexto, el último informe de Banca & Economía de Asobancaria destaca que el sistema financiero ofrece una variedad de productos dirigidos a las personas migrantes venezolanas. Estos productos incluyen cuentas de ahorro de trámite simplificado (CATS), cuentas de ahorro programado, depósitos electrónicos, créditos, seguros, envíos de remesas y giros internacionales.

Según el informe, al 31 de marzo de 2023, la población migrante venezolana en Colombia había adquirido un total de 801.071 productos financieros, distribuidos entre 515.880 usuarios. Este número de usuarios representa el 21% de la población pre-registrada en el RUMV hasta el tercer mes de este año.

«Se evidencia la preferencia del uso de cuenta de ahorro, con el 61% de participación respecto a los demás productos, seguido por depósito electrónico con el 26%. Se encuentran dos picos en la adquisición de depósitos electrónicos, el primero en el segundo trimestre de 2020, que corresponde al inicio de la pandemia, lo que puede estar ligado a transferencias que responden a necesidades por la crisis, y uno segundo en el cuarto trimestre de 2022», concluye el documento.