«No ha sido una tarea fácil gobernar en un país que tiene un Estado racial, con un Gobierno que también practica el racismo y el patriarcado», acusó Márquez, quien se lamentó de las carencias con las que ha tenido que vivir estos años al frente de su despacho.
«Cuando llegué, llegué con muchas ilusiones de cambios y sueños y esperanzas, pero he tenido muchas trabas y obstáculos para materializar esos sueños y esas esperanzas para mi gente, para mi pueblo y para este país», afirmó.
Según la Vicepresidenta, su despacho no tiene un presupuesto asignado, ni recursos para ejercer sus funciones, de manera que ha tenido que recurrir a la cooperación internacional o al apoyo de mandatarios regionales, incluso para organizar reuniones.
«En este Gobierno me ha tocado llegar a los territorios y a veces tocarle las puertas a un alcalde para que financie una reunión de articulación interinstitucional. Entonces ha sido sin garantías económicas, sin presupuestos concretos, asignados a la Vicepresidencia para hacer el trabajo. Lo que he podido lograr lo he hecho en articulación con cooperación internacional que me han apoyado fuertemente», precisó.
Esta no es la primera vez que la Vicepresidenta acusa a Petro y su círculo de poder de darle la espalda a las propuestas de cambio que hizo camino a la elección de 2022. En febrero pasado cuando se transmitió por televisión el primer consejo de ministros, la Vicepresidenta lamentó los casos de corrupción en el Gobierno que ayudó a elegir.
Márquez esa noche, en vivo ante el país, lamentó la llegada al entorno del Presidente del ahora ministro de Interior, Armando Benedetti, además se quejó del irrespeto de la canciller, Laura Sarabia, hacia ella.
También le reprochó a Petro que le hubiera entregada el Ministerio de La Igualdad en un papel, sin presupuesto, ni apoyo para su edificación; se quejó además de la falta de estructuración para emprender cambios en sectores sensibles del país, al tiempo que lamentó la violencia que se ha apoderado de su departamento, el Cauca.
Tres semanas después de ese Consejo de Ministros, la Vicepresidenta fue despojada del Ministerio de la Igualdad por decisión de Petro, que encomendó del mismo a Carlos Rosero.