Un golpe legislativo que estaba cantado desde hace más de dos meses sufrió este martes las bancadas que hacen oposición al presidente de la República, Gustavo Petro, el hundimiento del proyecto de ley que buscaba convocar a los colombianos a un referendo para darle la autonomía fiscal a las regiones.
La iniciativa, que tuvo como su principal defensor al gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, no se había podido votar porque pese a que estuvo en el orden del día no alcanzaba la votación necesaria para hundirlo o avalarlo. Este martes cuando por fin se destrabó el mismo se archivó con 8 votos, mientras 7 senadores votaron por su aprobación, aunque hubo unas posturas que generaron sorpresa.
Los senadores que apoyaron el proyectos fueron Carlos Motoa (Cambo Radial), Óscar Barreto (Partido Conservador), Julio Chagüi (Partido de La U), Alfredo Deluque (Partido de la U), Jonathan Pulido (Alianza Verde), Jorge Benedetti (Cambio Radical) y Juan Carlos García (Partido Conservador).
Por el no estuvieron los senadores Clara López (Pacto Histórico), María José Pizarro (Pacto Histórico), Carlos Chacón (Partido Liberal), Carlos Benavides (Pacto Histórico), Aida Quilcué (indígena), Ariel Ávila (Alianza Verde), León Fredy Muñoz (Alianza Verde) y Temístocles Ortega (Cambio Radical).
Sorprendieron los votos del conservador Germán Blanco, Julián Gallo (Comunes), Fabio Amín (Comunes), Paloma Valencia y María Fernanda Cabal (Centro Democrático) se abstuvieron de votar.
El ponente principal, senador, Carlos Fernando Motoa, sostuvo que “se trataba de una iniciativa ciudadana que recogió, a nivel nacional, más de 4.1 millones de firmas que respaldan el proyecto. No es de iniciativa presidencial (como la Consulta de Petro), es decir, viene impulsada de abajo hacia arriba. Lo que la inviste de una legitimidad similar a la que tenía la Consulta Anticorrupción del 2018 o mucho más atrás la Séptima Papeleta que dio origen a la Constitución actual”.
El referendo buscaba que los impuestos de renta y patrimonio se queden en los departamentos donde tributan las personas naturales y jurídicas para lograr el desarrollo que exige la Carta Política del 91 y los mismos ciudadanos.
Según Motoa, “el referendo es un mecanismo de participación política que como el voto, la revocatoria del mandato o el plebiscito goza de especial protección constitucional, pues fortalece la democracia, refuerza el control social sobre lo público y fomenta el sentido de responsabilidad entre amplios sectores de la ciudadanía. Por no mencionar, que la participación es un derecho fundamental que legítima decisiones del Estado, al menos así lo contemplan los artículos 274 y 278 de la Carta Política y la Ley 1757 de 2015”.
Por su parte el el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, dijo que el principal enemigo de esta iniciativa fue el presidente Gustavo Petro, “con esta decisión pierden las regiones y gana el centralismo. Celebran quienes quieren controlar la riqueza que se genera en las regiones pero que se concentra y maneja desde el asfixiante gobierno central”.
Rendón planteó además que “quienes se opusieron al referendo, porque se salieron después de haber dado el sí o porque lo votaron negativamente, le hacen un favor a Petro y al peligro que representa la concentración del poder en el nivel central. Siguen creyendo que desde un escritorio en Bogotá definen el destino de las regiones y la vida de los ciudadanos”.
Foto y noticia: Colprensa