La Fiscalía General de la Nación imputó a dos exfuncionarios de la Gobernación del Atlántico por presuntas irregularidades en el proceso de contratación de cascos en fibra de vidrio para lanchas de pesca artesanal.

Los exfuncionarios imputados son la exsecretaria de Desarrollo Económico de la Gobernación y actual vicepresidenta jurídica de la Fiduprevisora, Milagros del Carmen Sarmiento Ortiz, y el subsecretario de Gestión Agropecuaria de Atlántico, Martín Rafael Atencio García.

La Fiscalía les imputó los cargos de celebración de contratos sin cumplimientos de requisitos legales, falsedad ideológica en documento público y peculado por apropiación, y a Sarmiento Ortiz le fueron formulados cargos por falsedad en documento privado y fraude procesal.

Según las investigaciones, Sarmiento ordenó abrir, en mayo de 2014, una licitación por 1.000 millones de pesos para el suministro de 170 cascos, cada uno por un valor de algo más de 5’800.000 pesos, a pesar de que una consultoría los había avaluado en un menor costo. El proceso finalmente fue declarado desierto por falta de oferentes.

Luego, el 10 de julio de 2014, la exfuncionaria puso en marcha un mecanismo de selección abreviada para la compra de 200 cascos, contrato que se firmó el 12 de septiembre de 2014 con una fundación privada por un valor de 980 millones de pesos.

Según la Fiscalía, Sarmiento habría acordado favorecer a un contratista que no cumplía con los requisitos legales exigidos, no tenía experiencia ni capacidad suficiente para elaborar las lanchas, carecía de un astillero en Atlántico y tampoco tenía el musculo financiero para producirlos.

Eso implicó modificar los pliegos de condiciones y llevó al comité evaluador a calificar indebidamente la propuesta comercial, validar documentos con información falsa y vincular a un profesional, por 17 millones de pesos, para que asesorara al contratista.

El 24 octubre de 2014, un día antes de acabar el plazo de entrega, el contratista solo había suministrado 32 de los 200 cascos que se comprometió a fabricar en 29 días.

El contrato fue suspendido, supuestamente a causa de la temporada de lluvias, sin que se fijara una fecha para entregar los cascos restantes, que finalmente fueron entregados el 12 de diciembre de 2014.

Foto y noticia: Colprensa