Durante la apertura del 23° Congreso de Riesgos, realizado en Cartagena, expertos del sector financiero analizaron los desafíos que enfrenta la economía colombiana para 2026, en un contexto marcado por tensiones internacionales, alto déficit fiscal y un aumento significativo en el uso de canales digitales.
Alejandro Vera, vicepresidente técnico de Asobancaria, expuso que el incremento de la tasa arancelaria ponderada en Estados Unidos —que pasó del 2,4% al 17%— ha impactado cerca del 82% del comercio global. También se refirió a los efectos económicos de los conflictos bélicos, cuyo costo anual estimado alcanza los 20 billones de dólares, cifra equivalente al PIB de la India.
En el plano nacional, Vera señaló que el déficit fiscal de Colombia cerraría este año en 6,7%, muy por encima del 2,5% registrado antes de la pandemia. Asimismo, mencionó la incertidumbre que generan las elecciones presidenciales de 2026, que reúnen más de un centenar de precandidaturas.
A pesar de este panorama, el sistema financiero muestra señales de fortaleza. La cartera total llegó a 784 billones de pesos en septiembre, con desembolsos adicionales por 55 billones para apoyar la actividad económica. El indicador de solvencia bancaria se ubicó en 17%, cifra superior al mínimo regulatorio.
Rebancarización y crédito: un reto central
Entre los principales desafíos para 2026, el vicepresidente destacó la necesidad de reincorporar a cerca de ocho millones de personas que hoy están por fuera del sistema financiero después de incumplimientos crediticios. Según explicó, será clave desarrollar productos ajustados al perfil de estos usuarios y acompañar sus procesos de recuperación financiera.
También subrayó la importancia de fortalecer la cultura de pago y el uso responsable del crédito, recordando que el historial financiero sigue siendo un activo determinante para los ciudadanos.
Fraude digital: un fenómeno en expansión
El informe presentado indica que el 82% de las operaciones financieras en Colombia ya se realizan por canales digitales, frente al 68% registrado en 2019. Sin embargo, este crecimiento abre la puerta a un aumento en los casos de fraude, como ha ocurrido en países como Brasil tras la implementación del sistema Pix.
Para enfrentar este escenario, el sector trabaja en la unificación de protocolos de seguridad, el fortalecimiento de mecanismos de prevención y la creación de un centralizador de datos que permita generar alertas tempranas y mejorar el intercambio de información sobre incidentes.
Riesgos regulatorios en el horizonte
El sector bancario también se prepara para la Quinta Ronda de Evaluaciones Mutuas del GAFI, prevista para 2028, y para la implementación completa de estándares como Basilea III, incluyendo pruebas de estrés y autoevaluaciones de capital y liquidez.



