Mientras empeora la situación en Colombia tras 17 días de violentas manifestaciones  entre los manifestantes y la policía por cuenta del Paro nacional, se conocen historias desgarradoras como la de Alison Lizeth Salazar, una nueva víctima que dejan estas marchas.

Se conoció que la menor de 17 años se habría suicidado luego de, que al parecer, fuera golpeada, y arrastrada por cuatro agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), la noche del miércoles 12 de mayo en Popayán.

La joven, hija de un policía, habría tomado la terrible decisión la mañana de este jueves 13 de mayo en su casa ubicada en el barrio El Uvo, de Popayán. 

La joven tras ser retenida fue entregada a las 10: 51 de la noche y es entregada a la abuela materna quien era la persona que vivía con ella. Unas diez horas después de suicida y se conoce la noticia al medio día. Hasta el momento no se sabía que era la misma joven que había sido detenida en la URI.

En un video que ella compartió en su cuenta de Facebook, de acuerdo a la denuncia, se ve cuando cuatro uniformados de la institución se la llevan. Asì mismo lo contò en la misma red social: 

“Les tocó cogerme entre 4 no Hijueputas?? Yo soy a la que cogieron, en ningún momento me ven tirando piedras, no iba con ellos, me dirigía hacia la casa de un amigo que me dejaría a quedar en su casa», cuenta la joven.

Agregó «cuando menos pensé estaban encima, ni siquiera corrí porque era peor, lo único que hice fue esconderme detrás de un muro, y solo porque estaba grabando me cogieron, en medio de eso me bajaron el pantalón y me manosearon hasta el alma».

La misma Alysson denunció «en el video queda claro que yo les digo que me suelten porque me estaban “desnuando” quitando el pantalón”, dice la joven a través de la red social Facebook».

“Pero casi les da un mal cuando me revisaron los documentos y se dieron cuenta que soy hija de un policía, apoyo totalmente el paro y las manifestaciones, pero ayer NO ESTABA CON LOS DE LAS MARCHAS”, indicò la menor.

Este viernes el  brigadier general Ricardo Augusto Alarcón Campos, comandante de la Región Número Cuatro de la Policía, desmintió los hechos y aseguró que están realizando las investigaciones.