Medellín, abril 13 de 2024. Tras la presentación del informe Comuna 13, Sujeto de Reparación Colectiva”, la Unidad para las Víctimas iniciará un proceso de revisión y valoración que tendrá en cuenta esta investigación Procuraduría General de la Nación como un insumo para diagnosticar los daños del conflicto armado en esta zona de Medellín y la resistencia de su comunidad.

Así lo indicó Andrea Nathalia Romero Figueroa, directora de Registro y Gestión de la Información de la entidad luego del acto en la capital antioqueña, en el que recibió el documento de manos de la procuradora general, Margarita Cabello Blanco.

Lea También: ¿Dónde está la plata? Fico entregará 9 millones a mujeres en Medellín

“Es un insumo importante para tomarlo en cuenta como parte de la declaración que algún representante de la comunidad deberá realizar (ante el Ministerio Público) sobre las circunstancias de modo, tiempo y lugar en los que ocurrieron los hechos victimizantes”, dijo Romero.

El informe, elaborado con participación de habitantes, víctimas y organizaciones sociales, señala que la población sufrió “reclutamiento infantil, desplazamiento forzado, desaparición forzada, violencia sexual, entre otras graves violaciones de los derechos humanos, que cercenaron los proyectos de vida, especialmente de jóvenes, mujeres, población afrodescendiente, líderes y defensores de derechos humanos”.

Según Romero, en los próximos meses “una vez la Unidad para las Víctimas defina con una resolución si se incluye o no (la Comuna 13) en el Registro Único e iniciar una ruta para diagnosticar los daños y cuáles serían las medidas que se implementarán dentro de un plan de reparación colectiva”.

En caso de una valoración positiva de la Comuna 13 como sujeto de reparación y que cumplan las fases de la ruta, se deberán concertar con la comunidad acciones y medidas como proyectos comunitarios y productivos, rehabilitación psicosocial, fortalecimiento de organizaciones, obras de memoria histórica, entre otras.

Hasta ahora, la Unidad para las Víctimas tiene rutas de atención y reparación individual a los delitos de las personas afectadas por el conflicto armado de la Comuna 13, que incluyen medidas de satisfacción, ayuda humanitaria a desplazados, atención sicosocial e indemnización. En articulación con la Alcaldía de Medellín funciona el punto de atención de Belencito y programas sociales (salud, educación, vivienda, generación de ingresos y emprendimientos).

“Reconocimiento a nuestra resistencia”

Desde 2017 la organización Mujeres Caminando por la Verdad está reconocida por la Unidad para las Víctimas como sujeto de reparación colectiva, cuyo plan se encuentra en diseño y formulación de medidas. La conforman más de 150 familiares de desaparecidos en lugares de la comuna 13 usados como fosas, como la escombrera.

Le Puede Interesar: Terrazas verdes, la apuesta sostenible que se toma la Comuna 13

Para una de sus integrantes y líderes, Luz Elena Galeano, quien busca a su esposo desaparecido, la “solicitud de reparación colectiva para la comuna 13 es un reconocimiento a las víctimas y las luchas y resistencias de diferentes organizaciones que le hemos apostado a la búsqueda de verdad, justicia y reparación para quienes sufrimos el flagelo de la violencia y denunciamos eso delitos”.

Esa victimización se produjo desde los años noventa por las acciones violentas y disputas entre milicias de las guerrillas del ELN y las FARC, los grupos de autodefensas y cuestionadas operaciones militares. Y en años recientes, por los llamados combos delincuenciales.

La Unidad para las Víctimas también ha apoyado en años anteriores los planes de búsqueda de desaparecidos y exhumaciones en La Escombrera y otras acciones de resistencia, memoria y proyectos artísticos de las organizaciones a favor de sus derechos e inclusión social.

En la actualidad, esta zona de Medellín conformada por más de 20 barrios vive una transformación física y de reconstrucción social con el arte urbano, la memoria histórica para la superación de la violencia y la promoción turística como atractivos.