Fedetranscarga manifestó su preocupación por la seguridad en las carreteras del país tras el inicio de un paro armado anunciado por el ELN, vigente desde la mañana del 14 de diciembre y previsto hasta el 17 del mismo mes, una situación que ha generado afectaciones a la movilidad y a la cadena logística nacional.
De acuerdo con información divulgada por Fedetranscarga, desde el comienzo del paro armado se han reportado al menos 13 hechos que impactan la operación del transporte terrestre. Entre los eventos señalados se encuentran bloqueos viales en el municipio de Pelaya y actos delictivos en Curumaní, en el departamento del Cesar, así como la voladura del peaje La Lizama mediante una motobomba, hecho que dejó dos personas heridas.
El reporte también incluye el asesinato de un conductor de ambulancia en el departamento de Santander y el cierre total del sector de San Roque, en Curumaní, tras la verificación de la presencia de contenedores con artefactos explosivos improvisados en la vía.
Según el gremio, la situación se agrava luego de que el grupo armado ilegal anunciara que considera como objetivos militares las instalaciones y vehículos de las Fuerzas Armadas, lo que incrementa el nivel de riesgo en los corredores viales y expone a los transportadores que continúan prestando el servicio.
Las afectaciones se presentan en una temporada de alta demanda comercial, lo que podría impactar el abastecimiento de productos y el normal desarrollo de la actividad económica en distintas regiones del país. El transporte de carga es un componente clave de la cadena logística nacional y su interrupción tiene efectos directos sobre el suministro de bienes a los hogares y al comercio.




