Las menciones de Gustavo Petro a Juan Carlos Pinzón ya no son deslices. Tampoco provocaciones sin intención. Son síntomas de algo más profundo: el presidente está incómodo. Y lo está porque Pinzón, sin aparato estatal ni show mediático, ha comenzado a instalarse como un rival de fondo, de fondo y con fondo.
Lo que parecía una reacción en redes sociales luego del anuncio del acuerdo de paz entre Israel y Hamás, que puso fin a más de dos años de enfrentamientos en Medio Oriente, se convirtió en el disparo de salida para una batalla que ya no se disimula: el presidente Gustavo Petro ha graduado de enemigo político a Juan Carlos Pinzón, y lo ha hecho públicamente y en plena plaza digital, reconociendo sin quererlo al rival que le incomoda más.
Con un trino contundente del exministro de Defensa y exembajador en Washington sobre política exterior que, lejos de pasar desapercibido, encendió la mecha presidencial.
“Paz a través de la fuerza. Trump y Netanyahu a quienes conozco han demostrado que la defensa de los pueblos, los valores, la democracia, y la libertad se deben hacer con toda la fuerza, determinación y amor.”
Pinzón aseguró que en su gobierno, Colombia recuperará su estatus internacional y tendrá una relación estratégica con las naciones democráticas del mundo. Además felicitó a Estados Unidos y a Israel.
La respuesta del presidente Petro fue directa y despectiva: “No sé si Colombia quiera un Netanyahu de presidente. Creo que ya han tenido varios y ha dejado 700.000 colombianos asesinados.”
Un intento de desprestigiar, pero que solo confirmó lo que ya es un secreto a voces: Juan Carlos Pinzón se convirtió en una preocupación real para el petrismo. Con una comparación grave, un número sin contexto y una acusación velada, el presidente, sin nombrarlo, apuntó directamente a Pinzón, quien, lejos de esconderse, le contestó con la frente en alto y lle enrostró que prioriza a los terroristas de Hamás.
“Tiene razón, Presidente: el pueblo decidirá su propio destino. Sé que rechazará la continuación de sus políticas y las del Pacto Histórico, que solo han traído violencia, incompetencia y fracaso a Colombia. Usted prioriza a los terroristas de Hamás sobre el pueblo colombiano trabajador”.
En un video publicado en sus redes sociales, el precandidato Pinzón reafirmó su ofensiva contra Petro y le recordó las alarmantes cifras de muertes violentas en su era con el 2024 como el año más crítico.
“¿Quiere hablar de presidentes que han dejado muertos en Colombia?, ¿Qué tal el incremento del homicidio? Más de 14 mil homicidios en un año” y agregó “Petro, mírese al espejo”
No es la primera vez. Hace apenas unas semanas, durante un evento público, Petro soltó con sorna: “Pero ellos saben, que si yo me lanzara a elecciones los barrería de lejos… pónganme a Pinzón, a los tibios, y les gano a todos juntos.”
La respuesta del exministro fue un puño político cargado de análisis:
“Petro me tiene miedo. Petro sabe que su tiempo se acaba en 2026. Es impopular y ha dejado destrozada la economía y la seguridad de los colombianos.
Es un caos lo que ha creado en el país. Por eso, en lugar de defender su gestión, tiene que atacar. Y me ataca a mí, porque sabe que cuando yo cambie las cosas, su visión de una Colombia quebrada y aislada quedará en evidencia”.
El ruido que crece: ¿Quién es este que ya molesta tanto?
El rifirrafe confirma lo que ya muchos analistas venían diciendo: el Gobierno y sus fanáticos ven en Pinzón a un rival poderoso porque representa todo lo contrario: Seguridad, orden y beneficio para el bolsillo de los colombianos, y lo atacan porque empieza a ganar terreno.
Pinzón también le cantó la tabla al candidato Daniel Quintero y le sacó a flote los escándalos de corrupción que lo mantienen en líos con la justicia.
Para muchos ciudadanos, el hecho de que Petro y sus cercanos estén tan pendientes de Pinzón es una señal clara de preocupación. El presidente y sus alfiles no atacan a los que no ven como una amenaza.
En redes sociales crece la conversación:“¿Quién es ese Pinzón que ya le quita el sueño a Petro?” “Si el presidente le tiene miedo, algo está haciendo bien.”
Pinzón, sin hacer circo ni escándalos virales, se ha posicionado como una opción seria, decente y con credenciales que incomodan. Y el hecho de que el mismo presidente de la República lo elija como blanco es la confirmación más fuerte de todas: Juan Carlos Pinzón ya está en el radar. Ya está en la contienda. Y llegó para dar pelea. ¿Será este el primer gran duelo de 2026?