El colombiano Jairo Roque Galíndez Mosqueira, de 48 años, enfrenta juicio en  Marsella (Francia) junto a otras 29 personas, acusado de formar parte de una red internacional de tráfico de drogas que operaba desde la ciudad de Niza.

De acuerdo con la investigación, Galíndez habría sido reclutado por sus conocimientos técnicos como “químico experto en la manipulación de cocaína”, un rol clave para aumentar el volumen y modificar la pureza del estupefaciente antes de su distribución. La jueza de instrucción del caso destacó que su dominio de la “técnica para cortar” la droga era fundamental dentro de la estructura delictiva.

Las autoridades francesas indicaron que el colombiano habría trabajado durante varios años con la organización, aunque no precisaron el tiempo exacto de su permanencia en el grupo criminal. Su labor se integraba a una compleja red que incluía transportistas, mecánicos, encargados de custodia y coordinadores logísticos que facilitaban el ingreso de cocaína desde *Países Bajos y España* hacia el sur de Francia.

Una red criminal con base en Niza y vínculos en Europa

El macroproceso judicial reúne a *21 hombres y siete mujeres, además de dos personas juzgadas en ausencia, por hechos ocurridos entre 2020 y junio de 2021. Según la acusación, los cargamentos de droga llegaban a Niza cada ocho a quince días, transportados en vehículos modificados con compartimentos ocultos. Para reducir riesgos en caso de captura, la organización limitaba cada envío a un máximo de cinco kilos de cocaína.

La investigación señala como presunto líder a Víctor Tavares Sánches, alias “Le Black”, quien habría coordinado la operación desde una cárcel en el sur de Francia, donde ya cumplía una condena de 12 años por otro caso de tráfico internacional. Su cómplice, Mohamed Maadi, amigo cercano y conductor de confianza, también fue identificado como cabecilla del grupo.

Durante las primeras audiencias, Maadi aceptó su participación en el negocio ilícito. El tribunal penal de Marsella continuará el juicio durante las próximas semanas, y el *fallo final está previsto para el 5 de diciembre de 2025*.