Un terremoto de magnitud 7,1 sacudió este miércoles el norte de Filipinas, según informó el Centro Sismológico Europeo del Mediterráneo (EMSC). El epicentro se situó a 20 kilómetros al noreste de la localidad San Ramón, y tuvo una profundidad de 10 kilómetros.

El Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología midió la fuerza en 7,3 grados de magnitud. Según el Centro Europeo, el epicentro se centró en la provincia de Luzón, mientras que el organismo filipino considera que el temblor se produjo en la provincia de Abra, en una zona montañosa, y luego se produjeron varias réplicas.

El impacto se sintió en la capital, Manila, a más de 400 kilómetros de distancia, donde trabajadores y residentes se evacuaron de los edificios.

Por su parte, el Servicio Geológico de los Estados Unidos midió la fuerza del terremoto en 7,0 y la profundidad en 10 kilómetros. Unas horas después, el ministro del Interior, Benjamin Abalos, comunicó que cuatro personas fallecieron a causa del fuerte movimiento telúrico.

«Sesenta personas resultaron heridas, cuatro fallecieron», dijo Abalos. El ministro agregó que el terremoto dañó 29 carreteras, tres puentes, 173 edificios gubernamentales y privados, así como provocó 58 deslizamientos de tierra.

Filipinas se encuentra a lo largo del ‘Cinturón de Fuego’ del Pacífico, donde se producen la mayoría de los terremotos del mundo. A su vez, también recibe unos 20 tifones y tormentas tropicales cada año, siendo uno de los países más propensos a las catástrofes naturales.

Con la información de Sputnik