Un incendio de proporciones mayores se registró en la noche del domingo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario de Villavicencio (Meta), hecho que dejó un menor muerto, el cual se encontraba en esta unidad y que obligó a evacuar del lugar a los pacientes y personal médico.

Debido a la emergencia, los pacientes en estado crítico tuvieron que ser trasladados a otros centros asistenciales de la ciudad y la región, según explicó el alcalde de la capital del Meta, Felipe Harman, quien entregó detalles de esta emergencia que causó pánico entre los habitantes de zonas aledañas.

El mandarario, ante la magnitud de lo sucedido, y la presencia aún del virus del COVID-19, confirmó la declaratoria de alerta roja en la ciudad, en la que se cerró de manera preventiva todo tipo de servicios de emergencias, lo que implica un déficit de alrededor de 100 camas UCI ante esta situación.

«Según el análisis en el Puesto de Mando Unificado se decreta toque de queda y ley seca a partir de las 10:00 de la noche hasta las 5:00 de la mañana, que regirá hasta el próximo miércoles 15 de septiembre», explicó el mandatario.

Adicional a ello, la Defensa Civil informó que acudió a la emergencia con dos ambulancias y 13 voluntarios que evacuaron a 30 pacientes y 150 empleados hacia el polideportivo del centro hospitalario. Pese a ello, fue imposible salvarle la vida a un niño que quedó atrapado en las llamas.

De la misma manera, las autoridades han manifestado que se han evacuado más de 35 que pacientes que se encontraban en el centro hospitalarios, quienes han sido remitidos a la Clínica Primavera, Meta y Servimedicos. Se espera una evaluación de las causas de esta conflagración.

«No tenemos espacio para un accidente de tránsito ni para una riña, así que le pedimos toda la colaboración a los ciudadanos porque prácticamente nos quedamos sin la mitad de las camas», dijo Harman, quien le pidió a sus  coterráneos máxima responsabilidad, en momentos en los que la capital metense vive esta contingencia.