Olmedo López Martínez y el caso de presunta corrupción en la UNGRD siguen dando de qué hablar en Colombia: esta vez, el exdirector se pronunció para dejar claras sus intenciones:

«Desde el primer momento le informé al país, a los colombianos y a mi familia como testigo que iba a contar toda la verdad. Los colombianos esperan de mí respuesta y dije que las iba a contar y la seguiré dando».

Reitera que lo único que pide es que se garantice su vida y la de su familia, pues teme represalias por lo que va a confesar y los nombres que podrían estar involucrados.

«Lo único que he pedido es garantías de seguridad para mi familia y para mí. También dije que hay muchas personas que deben dar explicaciones, mismas que mencionaré en su debido momento».

Aún así, pone todo en manos de las autoridades competentes y espera que pronto se conozca toda la verdad sobre las personas involucradas.

«Ahora debo expresar que confío en la institucionalidad del Estado, porque las personas pasan, pero las instituciones se mantienen y la historia me dará la razón».

 

Sin embargo, López Martínez rechaza que oportunistas salgan a desviar la atención y a ensuciar su nombre, aprovechando que no salió más a entrevistas y medios de comunicación.

«En la medida en que he decidido romper mi silencio, aún cuando mis anteriores amigos hoy me satanizan y se burlan de mí, haciendo uso del micrófono a través de sus amigos, dejando ver que esto que estoy haciendo es una especie de espectáculo, cuando en realidad estoy asumiendo un riesgo de muerte con muchísima valentía y gallardía».

Asegura que desde que decidió cooperar con la justicia, ha sido víctima de múltiples ataques contra su buen nombre:

«Un momento trascendental para la historia de mi amada Colombia, contar la verdad puesta,
no he salido públicamente y ya soy objeto de un sin número de comentarios y amenazas o señalamientos».

Lamenta que la situación se haya tornado de esta manera, pero reitera que no esconderá nada y hace un llamado a las personas que trabajan con él desde hace más de tres décadas:

«Muchos me ven como un traidor y a ellos les quiero decir que hace 32 años empezamos una lucha que buscaba transformar para bien la historia de Colombia, ustedes y yo lo sabemos, en el camino nos equivocamos».

Señala que todas las personas involucradas deberían hacer lo mismo por respeto al movimiento de cambio que pregonaban:

«No podemos repetir las malas prácticas y me arrepiento y por eso el primer momento decidí cooperar, porque debemos ser un verdadero ejemplo de cambio».

Insiste en que la verdad solo saldrá a la luz si le brindan las garantías e hizo un llamado a los jóvenes progresistas para no desfallecer en su lucha:

«Le pedí a las instituciones del Estado garantías, a Dios, sabiduría, y a mi familia fortaleza, esa que nos unió y ha caracterizado durante 32 años de lucha, jamás llegue a pensar que este momento en mi vida fuera tan definitivo, por eso tomé esta decisión que terminara empujando a esos jóvenes a no cometer errores como los nuestros y a seguir luchando».

Para finalizar, Olmedo López se puso a disposición de las autoridades competentes y reiteró su compromiso con la verdad.

«No quiero que se desanimen, por eso tomé esta decisión de manera libre y luego de mucha reflexión. Señora Fiscal General de la Nación, espere de mí, la verdad y solo la verdad, honorables magistrados, con profundo respeto a ustedes también para decirles que esperen de mí, la verdad y solo la verdad, funcionarios y trabajadores del Estado colombiano les envío mi más sinceras disculpas cometí un error y debo repararlo».