El conflicto entre Israel e Irán escala rápidamente. Este domingo, el ministro de Salud iraní, Hossein Kermanpour, confirmó que al menos 224 personas han muerto y más de 1.257 han resultado heridas tras los bombardeos israelíes iniciados el pasado viernes.
En total, 1.481 personas han sido hospitalizadas, entre ellas las víctimas mortales, en medio de una de las ofensivas más agresivas registradas en la región en los últimos años.

Los ataques israelíes han golpeado duramente a Irán, alcanzando infraestructuras clave como la sede del Ministerio de Exteriores, el Comando de la Policía en Teherán y varias zonas residenciales. Además, al menos cinco coches bomba explotaron este domingo en la capital, según reportes de la agencia estatal IRNA. La ofensiva también ha cobrado la vida de altos mandos militares y científicos relacionados con los proyectos nucleares del país persa.

Irán no ha permanecido en silencio. En respuesta, ha lanzado ocho oleadas de ataques contra territorio israelí, provocando la muerte de al menos 13 personas. El intercambio de fuego entre ambos países ha elevado la alarma internacional, en medio del temor por una posible expansión del conflicto en toda la región.