Parte de la felicidad que dos familias de Aranzazu perdieron en un incendio que consumió hace dos años sus casas, la volvieron a tener este fin de semana con la entrega de nuevas viviendas. El Gobierno de Caldas, mediante la Secretaría de Vivienda y Territorio, y la Alcaldía lograron la construcción de estas soluciones en zona rural, gracias a un trabajo articulado.
Las casas están en las veredas La Tolda y Manzanillo de Aranzazu. A la entrega asistió el gobernador de Caldas, Luis Carlos Velásquez, quien señaló: “continúa la revolución de la vivienda en Caldas. A pesar de la pandemia, los sueños de las familias caldenses no pueden parar. Nos da mucho gusto ver la felicidad de los beneficiarios y continuamos trabajando unidos con las administraciones municipales, en este caso con la Alcaldía de Aranzazu, por el bienestar de todas las comunidades. Estamos trabajando para que Caldas sea un departamento de propietarios”.
Hablan los beneficiarios
Luz Dary Salazar: “no tengo palabras para expresar la felicidad que siento, al gobernador y al alcalde y a todos los que nos colaboraron, muchas gracias, estamos muy felices y les deseamos lo mejor, los sueños sí se cumplen”.
Claudia Yaneth Botero: “siento una felicidad muy grande, valió la espera, tuvimos fe, nunca perdimos la esperanza, y es un sueño hecho realidad, ya tenemos la casita. Dios es muy grande, a las familias que quieren una casa les digo que no pierdan la esperanza y que pronto la tendrán”.
Visita a bloqueras comunitarias
Durante el recorrido del fin de semana, el gobernador también visitó la zona rural de Chinchiná, donde 10 familias construirán igual número de viviendas, a través del programa de autoconstrucción y con las bloqueras comunitarias.
Mediante este programa y con la unión entre los hogares caldenses, las administraciones municipales y el Gobierno Departamental se adelantan obras de vivienda en Pácora, Salamina, Pensilvania, Filadelfia, Viterbo, Risaralda, Aguadas y Samaná.
