La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) indicó en las últimas horas que no hay restricciones para que Hidroituango pueda empezar a generar energía eléctrica, toda vez que es la medida «más efectiva y urgente» para mitigar los riesgos aguas abajo.

La conclusión de la entidad fue dada a conocer al término de un Puesto de Mando Unificado (PMU), que estuvo liderado por el ministro de Minas y Energía, Diego Mesa, y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).

«Como se trata de una medida de gestión del riesgo, la disposición preventiva vigente impuesta por la Anla no impide que el responsable del proyecto, Hidroituango S.A., genere energía eléctrica», afirmó Mesa.

Se espera que la primera turbina del proyecto, que ha estado estancado desde 2018 debido a una fuerte contingencia, entre en funcionamiento el próximo 26 de julio, de acuerdo al cronograma propuesto.

El PMU se citó en el proyecto para revisar en terreno las conclusiones del estudio que entregó la firma chilena Pöyry sobre el estado actual de la futura central. Tanto la Anla como Pöyry coincidieron en el riesgo que representa para las comunidades aguas abajo la operación permanente del vertedero.

El proyecto, a la fecha, presenta un avance general de 87,3 por ciento y EPM ratificó que la última unidad de Hidroituango entrará en funcionamiento entre enero y septiembre de 2023.