Desde el pasado 27 de septiembre, como estrategia de campaña electoral, se empezaron a distribuir por las calles capitalinas porciones de papel higiénico con la leyenda -«No la siga cagando, vote bien». Esta es la estrategia novedosa con la que la campaña de Juan Aarón, candidato al concejo de Bogotá por el Nuevo Liberalismo con el número 15.

Con esto Juan Aaron quiere dar de que hablar, haciendo referencia directa a lo que se considera, en la escena política bogotana, una administración cuestionable, que se ha evidenciado con el aumento en las cifras de inseguridad, la falta de oportunidades, el desaprovechamiento de escenarios deportivos, el poco apoyo que reciben las localidades en los diferentes programas liderados por las secretarías y las alcaldías locales, en fin, Bogotá actualmente vive un panorama desalentador.

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Ante esta situación y por la necesidad de devolver a Bogotá lo que le ha dado a todos aquellos que vienen de diferentes lugares del territorio nacional a establecerse en la capital, en busca de mejores y mayores oportunidades que permitan mejorar su calidad de vida, aparece en el panorama electoral Juan Aarón.

El candidato al Concejo de Bogotá siente la necesidad de levantar su voz y aportar todo lo necesario en pro de optimizar la seguridad, la movilidad, las oportunidades laborales, de salud, culturales, deportivas, turísticas y no menos importante, ejercer el control político, función fundamental del Concejo, para garantizar que las obras y todos los proyectos que emprendan las autoridades locales, se cumplan a cabalidad, optimizando los recursos públicos y velando porque las comunidades reciban los beneficios que se plantean en cada uno de esos proyectos.

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Juan Aarón llegó a Bogotá hace unos cuatro años, pero eso no ha sido un impedimento para pararse en la brecha a favor de los bogotanos. Avalado por el Partido Nuevo Liberalismo en Coalición con el partido en Marcha, con el número 15 en el tarjetón al concejo de Bogotá, quiere llegar al concejo para ser la voz de las regiones, porque se siente un hijo adoptivo de esta ciudad y en honor a ese título, tiene las mejores intenciones de trabajar por una Bogotá para todos.