La asociación de vigilancia privada E.C.O.S de Colombia, ha estado en constantes diálogos con el Ministerio de Trabajo y con Doctor Alfonso Mansur superintendente de vigilancia y seguridad privada, con el propósito de lograr mejorar las condiciones que afrontan los centros penitenciarios en Colombia.

Asimismo, las empresas de seguridad y vigilancia privada en el país, consideran que a través de la reforma penitenciaria se podría mejorar el sistema de seguridad y a su vez promover la resocialización en los centros penitenciarios. También, están dispuestas a brindar el acompañamiento y conocimiento pertinente para el desarrollo del proyecto, como también brindar su servicio de vigilancia en las cárceles de Colombia, con el propósito de mejorar la condición de vida de las personas privadas de la libertad.

Por su parte, el Director Ejecutivo de las empresas de seguridad privada mencionó que “las empresas de vigilancia y seguridad privada, así como prestan su labor en la seguridad ciudadana, en las empresas, en las calles, en los colegios, en los centros nacionales de producción y refinerías, también están especializadas para promover acompañamiento al estado y al gobierno nacional, para prestar vigilancia en las cárceles”, indicó Guillermo García vocero de la agremiación E.C.O.S.

El proyecto beneficiaría a más de 195.000 personas que actualmente están privadas de la libertad en Colombia, generando nuevos espacios habitables y agradables visualmente para la población reclusa en el país, permitiendo la creación de escenarios dignos y a su vez la trascendencia en sus vidas, lo que les permitirá generar una transformación en su manera de pensar y actuar dentro de la sociedad al momento de volver a la libertad, haciendo que el proyecto se un éxito, como explicó Martha Saavedra CEO de EPICA, “Que sean cárceles humanas, que den respeto y dignidad”, indicó.

Por el momento, continúan las investigaciones, análisis y valoraciones para la aprobación de este nuevo modelo basado en la humanización y premisa de máxima seguridad, con el cual se prevé crear un impacto social y ambiental en los centros penitenciarios de Colombia. Esto daría paso a la posible solución de diferentes problemáticas que alberga la delincuencia en el país, que si bien no se puede visualizar en el futuro inmediato debido a la costumbre social, se pueden plantear nuevas alternativas que permitan el desarrollo psicológico de las personas que están privadas de la libertad y a su vez la seguridad nacional.