Antioquia, 27 de marzo de 2024. Según la Organización Mundial de la Salud, la epilepsia es una de las enfermedades neurológicas más frecuentes, sin embargo, un adecuado tratamiento puede mejorar la calidad de vida de hasta el 70% de las personas con esta patología. Esta enfermedad se define como una afectación crónica, caracterizada por crisis recurrentes que se ocasionan por descargas eléctricas anormales de las células del cerebro.

“La epilepsia es una enfermedad que afecta a personas de todas las edades, en todo el mundo y la prevalencia es igual tanto en hombres como en mujeres. Las causas pueden ser diversas y entre estas se encuentran problemas en el parto que ocasionen daño cerebral, factores genéticos, cualquier tipo de lesión o traumatismos por accidentes, infecciones cerebrales como meningitis o encefalitis, accidentes cerebrovasculares que limitan la llegada de oxígeno al cerebro, entre otras. Aunque aún no existe una cura definitiva para la epilepsia, muchos pacientes logran vivir sin convulsiones con el tratamiento adecuado, ya sea con la administración apropiada de medicamentos anticrisis o por medio de cirugía”, comenta la Dra. Yamile Calle, epileptóloga del Hospital San Vicente Fundación Medellín.

Las crisis de epilepsia se clasifican en dos tipos: las crisis focales, que envuelven solo una parte del cerebro y puede extenderse al resto de la corteza cerebral, y las crisis generalizadas, que son las más difíciles de ver a través de resonancias, ya que el cerebro puede estar sano estructuralmente pero en su parte molecular tiene alteraciones en el funcionamiento y puede ocasionar pérdida del conocimiento.

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La manera más efectiva de determinar la enfermedad es a través de un diagnóstico clínico inicial, ya que no todas las personas que convulsionan tienen epilepsia. Por esto, el diagnóstico se basa principalmente en las descripciones de los eventos que hacen la familia y el paciente; en base a esto el médico tratante puede recurrir a ayudas diagnósticas para realizar exámenes más específicos como un electroencefalograma, resonancia magnética cerebral y estudios neuropsicológicos.

“La importancia de ofrecer un tratamiento oportuno y adecuado para estos pacientes es vital, ya que la epilepsia mal controlada puede ocasionar complicaciones y riesgos para la salud como lesiones durante una convulsión, ahogo, depresión o ansiedad, muerte repentina, deterioro de la memoria, entre otras. El Hospital San Vicente Fundación Medellín cuenta con un equipo multidisciplinario enfocado en el diagnóstico oportuno de la enfermedad para ofrecer un tratamiento personalizado. La institución tiene dos neurocirujanos funcionales, un neurocirujano de epilepsia, dos epileptólogos, un neuropsicólogo, una enfermera jefe, tres neuropediatras, trabajador social, neurólogos, entre otras especialidades. Además, contamos con un Laboratorio de Neurofisiología, el cual se encarga de realizar estudios para identificar enfermedades del sistema nervioso central, mediante la utilización de equipos y técnicas de análisis avanzado”, comenta Marta Nancy Mesa, enfermera profesional de la Clínica de Epilepsia del Hospital San Vicente Fundación Medellín.

Aunque la cirugía no es la primera línea de tratamiento, los pacientes que no responden bien a los medicamentos son evaluados para procedimientos quirúrgicos, dependiendo de su elegibilidad y estado de salud. El tipo de cirugía a realizar depende de la ubicación de las neuronas que desencadenan la convulsión y de la edad del paciente. Los tipos de cirugía incluyen la cirugía resectiva, la cual consiste en extraer una pequeña parte del cerebro con el objetivo de que las crisis mejoren. Y la cirugía no resectiva o de neuroestimulación, la cual consiste en colocar un dispositivo, parecido a un marcapasos permanente, en lo más profundo del cerebro o en el nervio vago, para liberar señales eléctricas que modifican la actividad que induce las convulsiones.

La Clínica de Epilepsia del Hospital San Vicente Fundación Medellín ha atendido hasta la fecha 440 pacientes aproximadamente, de los cuales 418 son adultos y 26 niños. La unidad se ha destacado por contar con un servicio de asistencia social para los afectados a través de programas terapéuticos de asistencia psicológica a pacientes y familiares, apoyo social, servicios de emergencia, acompañamiento, diagnóstico de la condición de base, tratamiento quirúrgico, entre otros.

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La Clínica de Epilepsia del Hospital San Vicente Fundación Medellín se une a la conmemoración del Día Mundial de la Epilepsia, una fecha para destacar la importancia de comprender esta enfermedad, y luchar contra el estigma social alrededor de la misma. Asimismo, es una oportunidad para incentivar la investigación y así mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen.