En una reciente entrevista con la exministra y médica Carolina Corcho, se abordaron los detalles fundamentales de la propuesta de Reforma al Sistema de Salud del Gobierno del Cambio en Colombia. La exfuncionaria, ahora ejerciendo como psiquiatra, ha asumido la tarea de desmentir la desinformación y explicar los beneficios de esta iniciativa, que se encuentra en proceso legislativo.

Por su parte la exministra señaló tres pilares de la reforma. En primer lugar, resalta la necesidad de un control estatal más efectivo sobre los recursos públicos destinados al Sistema General de Seguridad Social. Actualmente, Colombia destina anualmente 81 billones de pesos a este sistema, pero la falta de supervisión ha llevado a casos de corrupción, como el emblemático incidente en Saludcoop, donde se desviaron 1.5 billones de pesos destinados a la atención médica de los ciudadanos.

El segundo eje crucial se enfoca en la dignificación del trabajo de los profesionales de la salud. Corcho señaló que más del 70% de estos profesionales enfrentan condiciones precarias, recibiendo pagos cada varios meses y, en muchos casos, teniendo que asumir múltiples empleos para garantizar un salario digno. La reforma busca abordar estas condiciones, generando un capítulo de formalización y mejorando las condiciones laborales en el sector.

El tercer pilar enmarca la importancia de la salud preventiva o atención primaria en salud. La reforma propone un modelo que moviliza equipos de profesionales de la salud, incluyendo médicos, enfermeras y bacteriólogos, para realizar exámenes y detectar enfermedades de manera temprana. Este enfoque busca evitar la llegada de pacientes con enfermedades avanzadas, especialmente en áreas urbanas, donde actualmente se observa una detección tardía que afecta negativamente a los resultados de tratamiento.

 

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Desmintiendo mitos de la reforma…

Por otro lado, Carolina Corcho también desmintió varios mitos en torno a la reforma. Aclaró que los recursos públicos no se entregarán a gobernadores y alcaldes, y la reforma no busca estatizar el sistema de salud, sino optimizar el uso de los recursos para beneficiar directamente a las clínicas y hospitales. Además, las EPS no desaparecerán, sino que se transformarán en gestoras para colaborar en la entrega eficiente de medicamentos y en la organización de la red de servicios.

Finalmente, la exministra enfatizó que la reforma se ha construido en colaboración con la sociedad civil y representantes del sector salud, con el objetivo de abordar las injusticias y deficiencias observadas a lo largo de los años.